RESULTADOS
OBTENIDOS.
En cuanto al desarrollo del aprendizaje hubo una
evidente tendencia a la adquisición de la predisposición buscada, pero
percibimos que hubiera sido muchísimo más efectivo este tipo de proyecto al
inicio del calendario escolar, en la consecución de mejores resultados.
Aún así, tanto en los resultados de la
rúbrica diaria, como los de la ficha de observaciones de inicio y de final del
proyecto, se puede apreciar una clara tendencia a la mejora.
De este modo la diferencia entre la
primera y la segunda semana, en la puntuación de la rúbrica, en ítems como el
"control de la frustración" de posesión, oscila entre 7
y 10 puntos, variación muy destacable si tenemos en cuenta la edad del
alumnado, y la fuerte tendencia competitivo–agresiva (egoísmo), que denotan los
mismos.
Uno de los ítems en los que encontraron
más dificultades fue en el de "jugar y hablar respetando el
turno"; en estas edades si algo les sobra es energía y ganas de ser
protagonistas en juegos, charlas, etc., por ello mismo, cuando tienen algo que
contar les cuesta mucho trabajo esperar a que hablen los demás, e incluso
escucharlos; aún así hubo también evoluciones notables, que además de la
rúbrica, se observa en la ficha de observaciones.
Del mismo modo, los resultados de
esta última también denotaron una evolución en ítems tan importantes para
nuestro proyecto, como comparte juguetes y materiales, en el que se pasó
de 12 "no, nunca", a 5; y de 2 "si,
siempre", a 7.
En cuanto a la evaluación del proceso de
enseñanza, mostramos aquí los resultados de nuestra rúbrica; todas las
debilidades que encontramos atribuibles al proceso y que en la rúbrica se
señalan, tienen cómo origen el tiempo. Seguimos destacando que, aunque fue
bueno y obtuvimos resultados satisfactorios, se podría haber obtenido mucho más
de haber podido emplear más sesiones en el proyecto, y si además
nos hubiéramos encontrado al inicio de calendario escolar, para seguir
reforzando durante todo el año cuentos, y conceptos.
En cuanto al resultado de dicha metodología en los sujetos de
nuestro diseño, a pesar de su tierna edad, hemos apreciado como para ellos
también ha constituido una manera de aprender novedosa y significativa, en la
que todos ellos se han ido involucrando poco a poco, y de la que hemos obtenido
muy buenos resultados.
Y es que al aplicar los conocimientos que queríamos que
los niños adquirieran (empatía y altruismo contra egoísmo) mediante el
aprendizaje basado en proyectos, a problemas contextualizados en la vida real
del alumnado, contribuimos a que estos mismos se conviertan en pensadores
independientes, críticos y aprendan a aprender a pesar de contar con tan solo
tres años de edad ya que, cuando los niños se interesan en lo que están
haciendo, son capaces de utilizar toda su energía para alcanzar los
niveles más altos.
Así
pues, y gracias a esta nueva metodología ABP, podríamos afirmar que
hemos aprehendido que la mejor manera de aprender es construyendo el propio
aprendizaje, investigando y uniendo el nuevo conocimiento al conocimiento
previo, además de ir aprendiendo de otros compañeros con la puesta en común de las diversas
historias del proceso
realizado a la hora de poner en práctica dicha metodología, los diferentes
ejemplos, mapas conceptuales, las diferentes situaciones, diferentes rúbricas,
etc.
Del mismo modo, hemos percibido
la posibilidad de autonomía que se le concede a los alumnos en
su aprendizaje, ya que son ellos los creadores del
conocimiento, actuando nosotras como simples guías.